En la clase de hoy se han expuesto dos trabajos grupales sobre la educación emocional.
Hemos visto un documental sobre las clases del profesor de primaria Toshiro Kanamori. Este profesor da mucha importancia a los sentimientos de sus alumnos y las relaciones que se establecen entre ellos. "Deja que la gente viva en tu corazón", acorde con esta frase es su enseñanza en la empatía y la escucha verdadera de los demás. Kanamori opina que cada vez se valora menos la vida y, por eso, su objetivo es enseñar a valorar la vida y ser felices. En el primer día de clase pregunta a sus alumnos de 10 años: "¿Para qué estamos aquí?" y ellos responen a una: "Para ser felices". En sus clases, además de enseñar a aprender conocimientos teóricos, da pistas sobre como tomarse la vida para ser felices. Los alumnos tienen muy presente este objetivo.
Es muy emotivo ver la manera en la que el profesor Kanamori trabaja con sus alumnos sobre las emociones, la forma de preocuparse por el desarrollo integral de sus alumnos. Me impresiona y confunde que este hecho se sitúe en Japón, uno de los países donde la presión social en el sistema escolar es de los más exigentes del mundo, al igual que en Corea del Sur como pudimos ver en una clase anterior, de tal forma que la tasa de suicidios en jóvenes y niños es de las más elevadas. Si se comprueba que este método de enseñanza es mejor, más saludable para las personas, y que se adquieren igualmente conocimientos teóricos y prácticos, ¿por qué no se aplica a toda la educación Japonesa? ¿Por qué continúan habiendo muertes debido a la presión por los exámenes o por no poder acceder a las universidades?
Admiro mucho la actitud que muestra el vídeo de Kanamori, la froma de dirigirse a sus alumnos cuando habla de la vida, de las cosas que pasan y las que nos pasan, en consecuencia, a los seres humanos, con ésto me refiero a los sentimientos que se nos crean. Creo que tratar la realidad desde esa perspectiva es la mejor manera de comunicarse con los niños y las niñas. También me fascina cómo crea un espacio donde cada niño se exprese y cómo busca soluciones junto a ellos cuando hay un conflicto. De esa forma se establece una relación activa entre el profesor y los alumnos, sin perder el respeto a la figura del profesor. Los alumnos son capaces así de tomar decisiones por ellos mismos y de cuestionar al profesor cuando creen que algo no es justo, como pasa cuando Kanamori castiga a uno de los chicos por hablar en clase.
Tal vez tengamos que aprender a establecer el equilibrio entre todos estos aspectos, hacer que la escuela sea un espacio de crecimiento vital y no sólo un lugar donde los niños se "guardan" y mientras tanto aprender a leer, sumar, escribir, multiplicar, etc, que es la idea generalizada que tengo de nuestra educación hoy en día, y de la que somos todos responsables.
Después de hablar sobre el vídeo, con la siguiente exposición, hemos visto otro reportaje del programa "Redes" sobre la educación emocional, y hemos hecho una dinámica que consistía en hacer, en pequeños grupos, un círculo y en el centro se colocaba una persona a la que teníamos que decirle, uno por uno, algo positivo sobre él o ella. Aunque seamos gente que nos conocemos muy poquito, creo que ese ejercicio crea lazos, te enfrentas a la vergüenza de decir y que te digan, en ese momento eres vulnerable y creo que, al compartir la vulnerabilidad creas un vínculo común muy humano, es así como se genera la empatía.
Reir, llorar, aprender y aprender a pensar en los demás.
¿Es ése, entonces, el trabajo de un profesor?
¿Es por ésto por lo que un pedagogo ha de guíarse para diseñar el plan educativo?
¿Qué opinas?